MODELOS DE PENSAMIENTO
A veces pensamos sin una finalidad específica, como cuando divagamos, recordamos hechos o situaciones, fantaseamos respecto a algún tema o persona que nos atrae o damos vueltas y vueltas obsesivas sobre un problema. Pero estas formas de pensar no son el objetivo de este módulo.
Aquí hablaremos del pensamiento intencional: pensamiento mediante el cual nuestra mente opera sobre la experiencia con un propósito.
El pensar con un propósito se puede referir entre otras cosas a:
♦ Adquisición de conocimientos: investigación, experimentación.
♦ Elaboración de información: análisis de datos, procesamiento de los mismos, clasificación y síntesis.
♦ Evaluación: comparación de datos basándose en un criterio (moral, estético, profesional, etc.).
♦ Solución de problemas: análisis del problema, búsqueda de causas de soluciones, aplicación de soluciones.
♦ Creación: generación de conceptos, de nuevas formas de actuación, de expresiones estéticas.
Existen cuatro maneras diferentes de realizar pensamientos intencionales; pensamientos dirigidos a un objetivo:
Pensamiento lógico
Pensamiento creativo
Pensamiento sistémico
Pensamiento positivo
Cada uno de nosotros está más habituado a pensar de una de estas cuatro maneras o como mucho, en la combinación de dos de ellas.
Este hábito se retroalimenta constantemente, porque determina en la persona el estilo de aprendizaje y de procesamiento de la información.
Pero cada una de estas formas de pensamiento es adecuada para determinados problemas o ciertas situaciones y por el contrario, produce errores en otras.
Ante distintas situaciones hay una forma de pensamiento que permite responder de la manera más adecuada.