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BLOCKCHAIN E INTELIGENCIA ARTIFICIAL CONTRA ALIMENTOS PIRATA

• Uno de cada diez alimentos en el mundo está adulterado o mal etiquetado.
• En México, cada año mueren 16 mil personas debido a enfermedades transmitidas por alimentos, logrando un impacto económico a la salud que se estima en mil 100 millones de dólares al año.
• Los alimentos “pirata” les cuestan a los minoristas de productos legítimos 15 mil millones de dólares al año, mientras que a los consumidores de 30 a 50 billones de dólares al año.
• El uso de tendencias tecnológicas como el blockchain e inteligencia artificial podrían salvaguardar la seguridad de los alimentos e incrementar la confianza de los compradores.

En la actualidad a nivel mundial se han encontrado varias inconsistencias en los alimentos. Desde adulteraciones, venta de estos con la fecha de caducidad vencida, hasta la transacción de comestibles procedentes de animales sacrificados ilegalmente. Representando una amenaza hacia la confianza del consumidor y la salud de la nación.
Según la FAO, uno de cada diez alimentos en el mundo esta adulterado o mal etiquetado. En México las cifras no son muy alentadoras ya que, gracias a esto, cada año mueren 16 mil personas debido a las enfermedades trasmitidas por alimentos, logrando un impacto económico a la salud que se estima en mil 100 millones de dólares al año, de acuerdo con Senasica.
Los alimentos piratas o fraudes alimentarios es un término utilizado para describir la recaudación monetaria a través de la manipulación o modificación de comestibles. Este delito afecta también a los productores, minoristas legítimos (a los que les cuesta 15 mil millones de dólares al año) y consumidores (30 a 50 de billones de dólares), conforme a la Universidad de Michigan. Existen varios tipos de fraude alimentario, los principales son:
o Alteración de ingredientes: A través de variación o falsificación de algún compuesto para reducir los costos.
o Publicidad o declaración engañosa: Exposición en el etiquetado de alguna característica, procedencia u origen de algún producto cuando éste no es verdadero.
Uno de los problemas que enfrenta la producción de alimentos es la contaminación en alguna de las fases de los procesos, ya que al no poder identificar de manera rápida donde surgió el brote, la seguridad del comprador se encuentra en peligro, mientras son retirados todos los lotes permeando las ganancias de la empresa.
Para evitar estas dificultades, los grandes retailers han implementado las tecnologías disruptivas como el blockchain y la inteligencia artificial. De acuerdo con la consultora Deloitte, los gobiernos alrededor del mundo utilizan la herramienta blockchain para: elecciones, monedas/pagos digitales, seguridad alimentaria y gestión de identidad etc. Por lo que, las inversiones en este instrumento durante el 2017 abarcaron 945 millones de dólares y para el 2021 se espera que alcance los nueve mil millones de dólares, a nivel global.
Este método es una base de datos distribuida, estructurada por cadenas de bloques diseñadas para evitar su modificación una vez que un dato ha sido publicado usando un sellado confiable y enlazando a un bloque anterior. Logrando un índice de seguridad del 98% en cada operación. Por otro lado, la inteligencia artificial es campo científico de la informática que se centra en la creación de programas y mecanismos que pueden mostrar comportamientos considerados inteligentes. El mercado de Inteligencia Artificial tendrá un valor de casi 60,000 millones de dólares para 2026, su nivel de confiabilidad es del 86% de acuerdo con Statista. Al designar estas herramientas los beneficios serían:
o Identificación y seguridad exacta: cualquier intento de manipular un consumible a medida que avanza a través de la cadena de suministro se alcanzaría a identificar y se evitaría inmediatamente antes de que la comida llegue al minorista.
o Transparencia para los compradores: se podría asegurar que los alimentos que adquiere la población son exactamente lo que la etiqueta afirma.
o Se evitaría la papelería innecesaria: al equivocarse algún productor solo se modificaría el sistema ahorrando un 89% de gastos en papelería, de acuerdo con IDC.
o Caducidad oportuna: se conseguiría identificar de manera oportuna las fechas de caducidad de todos los productos para lograr retirarlos del estante.
En palabras de Dafne Linares, directora de marketing de América Latina de NSF International: “El fraude alimentario en el país es un tema muy delicado en el mundo por los daños que este ocasiona a la salud y a la economía. Se necesita dar un paso a la descentralización, actualizar los sistemas e invertir en tecnología para poder prevenir posibles pandemias”.
El 2018 es un año electoral crucial, donde el reto de los candidatos presidenciales será contextualizarse y proteger a la ciudadanía con el uso de nuevas tendencias tecnológicas.

Yesica Flores

Soy Yes, blogger desde hace más de 5 años. Me he especializado en el viejo y olvidado arte de divagar