Cómo lidiar con preguntas capciosas en una entrevista laboral

A veces, estar preparado para una entrevista de trabajo significa estar listo para responder a todo tipo de preguntas, incluidas las más difíciles y capciosas. Las entrevistas laborales siempre incluyen al menos unas cuantas preguntas complicadas, algunas no tienen una respuesta correcta o incorrecta, solo están diseñadas para analizar reacciones y mostrar nuestra manera de pensar y lidiar con complicaciones.

Entonces, ¿cómo puedes responder a esas preguntas genéricas y difíciles, que a los entrevistadores les gusta hacer, sin recurrir a clichés? Paul Wolfe, vicepresidente senior de recursos humanos de Indeed, el sitio de trabajo número 1 del mundo, comparte algunos consejos para hacer frente a una entrevista de trabajo importante.

“¿Qué puedes decirme sobre tus debilidades?” Esta es una pregunta sobre autoconciencia, por lo cual se debe estar preparado para discutir áreas de oportunidad y mejora. Habla sobre cómo has mejorado en algunas áreas y el proceso que has seguido para lograrlo, así como el impacto que ha tenido en tu labor diaria.

“¿Qué dirían tus colegas, pasados ​​o presentes, que es lo mejor de trabajar contigo?” Piensa en cualquier comentario que hayas recibido o intenta identificar por qué tienes buenas relaciones de trabajo con quienes te rodean. Puedes basarte en tu lista de cualidades, solo asegúrate de tener argumentos y algunas anécdotas a la mano para complementar tu respuesta.

Es posible que muchos de nosotros no sepamos aun ni qué vamos a almorzar, pero tenemos que estar preparados para el momento en que los entrevistadores pregunten “¿Dónde te ves en tres o cinco años?”. El truco es darse cuenta de que están buscando una imagen general de sus aspiraciones y estabilidad, no una línea de tiempo o un plan específico. Imagínate en unos años y pregúntate qué ves. ¿Qué es diferente de donde estás ahora? ¿Hacia dónde te gustaría ir?

“¿De qué logros pasados ​​estás más orgullos@?” Al responder esta pregunta, elige los logros que sean apropiados para la situación y que te resulte cómodo compartir. Considera también cómo esos momentos han afectado quién eres como profesional. ¿Hay algún momento en que tomaste una decisión que tuvo un resultado positivo para un grupo de personas? ¿Qué pasa con una nueva habilidad que no estabas seguro de poder dominar, pero con la práctica se volvió mejor? Estas historias de éxito pueden convertirse en la base de tus respuestas a preguntas sobre sus habilidades, valores o aspiraciones.

“¿Qué habilidades tienes que te diferencian de tus compañeros?” Trata de recordar momentos en los que sobresaliste entre tus compañeros. Piensa en una situación en la que te diste cuenta de que estabas más preparado que los demás. Tal vez pudiste anticipar un resultado antes de que ocurriera, eres quizás, muy rápido y creativo, o tal vez seas minucioso y metódico. Todos tienen un estilo diferente; encuentra una forma positiva y sencilla de compartir tus cualidades destacadas con el entrevistador y recuerda que es mejor cuando complementas tus respuestas con anécdotas.

¿Y si te atoras con una pregunta? No te preocupes, has una pausa, pide un par de segundos a tu entrevistador y realiza preguntas aclaratorias para obtener información adicional. Mientras más información, más claridad, y mientras más claridad, mejor respuesta.

¿Tienes una entrevista de trabajo por venir? Tómate un tiempo para reflexionar sobre tus experiencias, esto te permitirá conocerte mejor desde distintas perspectivas, ayudándote a comprender mejor quién eres y qué buscas. La seguridad es clave y te facilitará responder a toda clase de preguntas.