El masaje íntegro de espalda comprende un número pequeño de fricciones distintas
INTRODUCCIÓN
El masaje íntegro de espalda consiste en un número pequeño de fricciones distintas, repetidas de diferente manera, según las necesidades de las zonas donde se aplican.
Para una mayor comprensión y sencillez hemos dividido estas fricciones en cuatro grupos : de Deslizamiento, de Profundidad mediana, de Fricción profunda y de Percusión.
No se preocupe mucho de la técica y permanezca más atento a las sensaciones de las manos y hacer que el masaje tenga una continuidad. Experimente con distintas velocidades y presiones tratando de desarrollar el sentido del ritmo, para que las manos pasen de un movimiento a otro distinto sin interrumpir el contacto.
LAS FRICCIONES DE DESLIZAMIENTO
Estas fricciones deberán realizarse suavemnete y deslizando rítmicamente las manos sobre la piel, como las olas al llegar a la orilla del mar. Se emplean en cualquier parte del cuerpo para empezar y para finalizar el masaje, y también como masaje de transición con el fin de amortiguar el cambio de un movimiento a otro. Estas fricciones no actúan sobre la profundidad de las masas musculares.
La Fricción Larga Esta fricción es un movimiento amplio, fluido y suave. Apoye suavemente las manos sobre el cuerpo del receptor. Con las manos juntas muévalas lentamente por la espalda, siguiendo las curvas del cuerpo. Cuando llegue a la región inferior de la espalda separe las manos y vuelva por los lados. Repita luego el movimiento 3 veces. Utilice esta fricción para extender el aceite o la crema por toda la espalda.
La Ondulación Acaricie suavemente la piel, usando la punta de los dedos y las manos alternativamente. Las manos deberán estar relajadas para poder recorrer una amplia zona sin tener la necesidad de cambiar de postura.
Movimientos amplios circulares Mueva las manos realizando circulos bastante amplios, como formando espirales.