España lidera la representación iberoamericana en los Oscars 2020
La 92ª edición de los premios por excelencia del cine a nivel mundial, ya descuentan las horas para que el Dolby Theatre vista sus mejores galas, desplegando glamour y elegancia por todos los costados. El pasado 2019 fue un gran año para la industria cinematográfica, con grandes producciones y geniales interpretaciones que hicieron las delicias del espectador. Muchas de ellas, lucharán por consagrarse también a nivel de galardones en la meca del cine, lo que supondría un antes y un después para todos los nominados que finalmente salgan victoriosos en la gala de Los Ángeles.
El cine iberoamericano está realizando las cosas muy bien en los últimos años. No en vano se fija como la alternativa clara al universo Hollywood con películas de calado y producciones que en las que ciertos apartados técnicos, de dirección e interpretativos rozan la perfección.
En este 2020 será la abanderada de todas las zonas de habla hispana, especialmente gracias a `Dolor y Gloria´ de Pedro Almodóvar. El manchego ha conseguido con su obra autobiográfica intentar luchar por el Oscar a la mejor película extranjera, hecho que ya consiguió en 1999 con ‘Todo sobre mi madre’. Pero la participación de ‘Dolor y Gloria’ en la gala no quedará ahí. Antonio Banderas opta al premio a mejor actor protagonista por primera vez en su trayectoria profesional, lo que sin duda pone de manifiesto la valía del malagueño cuando se pone delante de los focos, y el reconocimiento del sector conseguido a base de trabajo, tesón y profesionalidad. Lo cierto es que la casa de apuestas Betcris sí que contempla al largometraje como favorito a lazarse con la estatuilla. En cambio, Banderas tendrá una empresa muy difícil en Joaquin Phoenix, quien ha dejado para la historia su formidable interpretación en ‘The Joker’ y que previsiblemente se verá recompensado con el Oscar, como ya ha ocurrido recientemente en los Globos de Oro y los Bafta.
Pero la representación española no quedará ahí en esta edición de los premios de la Academia del Cine estadounidense. Klaus opta a conquistar el Oscar como mejor film de animación del año, lo que sería un auténtico hito para una disciplina que parecía estar vetada exclusivamente para las superproducciones de Hollywood.
