La contaminación en casa, hasta cinco veces más que en la calle
Desde prender una vela aromática, hasta la pintura y muebles, pueden emanar sustancias tóxicas imperceptibles en nuestra casa, como el benceno, afectando nuestro bienestar.
La contaminación es un problema global que causa a diario enfermedades respiratorias en la población. Tan sólo en México, urbes como Guadalajara, Monterrey o la CDMX presentan los mayores índices de contaminación superando ciudades como Medellín, Sao Paulo. De hecho, en lo que va del 2019, se han rebasado los límites de contaminación por lo que se han decretado tres contingencias ambientales en la Ciudad de México.
Las razones por las que incrementan los niveles de polución es debido a la emisión constante de gases provenientes de los vehículos y la generación de energía, a esto se le llama Material Particulado (MP), el cual debe estar entre los 40 y los 20 microgramos por metro cúbico, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud.
Sabemos que durante una contingencia ambiental, estar en el exterior puede afectar gravemente a la salud y el bienestar, por lo que se recomienda no salir de casa. Pero, contrario a lo que suele creerse, el aire en espacios interiores no es tan limpio como parece; de hecho, puede haber hasta cinco veces más contaminación en las casas o lugares de trabajo que afuera, de acuerdo con un estudio en la salud respiratoria y la contaminación del aire en interiores realizado por la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés).
Si bien, debemos preocuparnos por la polución de las ciudades, no olvidemos que pasamos más del 90% de nuestra vida en espacios interiores y hasta un tercio en nuestra habitación, y es en estos lugares en donde más se concentran los ácaros, el polvo y otros tantos elementos perjudiciales, tan pequeños, que creemos que una limpieza superficial es suficiente.
Estudios de la Organización Mundial de la Salud han demostrado que, aun en bajas concentraciones, las partículas contaminantes tienen efectos graves y no se ha identificado un umbral por debajo del cual no existan daños. Desde prender una vela aromática, hasta la pintura y muebles, pueden emanar sustancias tóxicas imperceptibles en nuestra casa, como el benceno, afectando nuestro bienestar.
Aunque imperceptibles, estos son algunos factores que pueden estar perjudicando nuestra salud y la de nuestras familias:
- Los gases producidos por chimeneas, hornos y calentadores domésticos son sumamente peligrosos y puede provocar intoxicación por monóxido de carbono; para evitar esto, se recomienda tener una buena circulación de aire en el hogar.
- Los muebles de madera prensada expulsan gas formaldehído.
- Cuando un hogar rebasa el 60% de humedad se producen moho y hongos, los cuales están asociados a enfermedades respiratorias graves. Los productos de limpieza liberan vapores y sustancias como el benceno.
- Los ácaros, el polvo, las heces y pelos de animales son causa de enfermedades como el asma y se puede evitar con una limpieza profunda, así como ventilar adecuadamente.
- Los productos para limpieza del hogar expiden Compuestos Volátiles Orgánicos que también pueden ocasionar daños a la salud.
“Los ingenieros de Dyson concluimos que para limpiar un espacio a profundidad se requiere identificar de manera automática la contaminación, capturar los alérgenos más finos y expulsar aire más limpio. Esto lo logramos con nuestro Dyson Pure Cool, el único purificador con tecnología Air Multiplier y con una oscilación de 350⁰ que permite expulsar aire limpio a todos los rincones de la habitación pues es capaz de expeler 290 litros de aire purificado por segundo”, comentó Jessica Rowley, Ingeniera en Diseño de Dyson.
Suelen advertirnos de los peligros de la polución y existen programas de contingencia, pero al entrar con los zapatos sucios, abrir puertas y ventanas, estamos metiendo partículas dañinas que contaminan el interior de nuestras casas. Por eso, debemos emprender acciones que no sólo reduzcan los niveles de contaminación de las ciudades, sino que puedan mejorar también el ambiente de nuestras casas, en beneficio de nuestras familias.