Los niños y niñas con quienes trabaja la Fundación viven en colonias de alta marginación como: La Planada, municipio de Coyotepec, Tequisistlán, municipio de Tezoyuca y San Francisco Tepojaco, municipio de Cuautitlán Izcalli, en el Estado de México. En muchos de los casos, los participantes de la jornada han visto vulnerados sus derechos; factores estructurales como los altos índices de marginación, la carencia de oportunidades educativas, el desplazamiento forzado y ahora se suman los efectos derivados del Covid-19, han permeado las relaciones familiares, detonando en muchos casos la deserción escolar, el trabajo infantil o el ejercicio de la violencia.
De acuerdo con el Informe de la pobreza multidimensional 2008-2018 del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) uno de cada dos menores de edad se encuentran en situación de pobreza; UNICEF estima que 6 de cada 10 niños en México son tratados con violencia como medida de disciplina; y de acuerdo con la Encuesta Nacional de Trabajo Infantil (ENTI) 2019 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), 3.3 millones de niños entre 5 y 17 años de edad laboran.
Ante este panorama de desigualdad, exclusión y vulnerabilidad, la Fundación Internacional María Luisa de Moreno trabaja en disminuir las brechas económicas, demográficas, sociales y de género que separan a los niños de ejercer sus derechos plenamente. Para tal fin la Fundación ejecuta programas de desarrollo humano, los cuales, acompañados de proyectos de asistencia humanitaria como la jornada de apoyo Un Día para el Niño, permiten articular de manera consistente el acompañamiento a los niños, niñas y sus familias en la construcción de los tejidos comunitarios que fortalecen valores y favorecen el desarrollo de habilidades para la vida.
En este contexto, el 29 de abril niños en condición de pobreza y pobreza extrema visitaron por primera vez en su vida el parque Reino Animal, en el municipio de Oxtotipac, Estado de México. Durante la jornada los asistentes tuvieron la oportunidad de aprender prácticas de cuidado animal y ambiental, mientras fortalecieron habilidades sociales. El recorrido incluyó el safari, actividad en la cual los participantes pudieron observar y alimentar a animales como jirafas, cebras, camellos, bisontes y avestruces, entre otros, en un ambiente muy similar a su hábitat natural; visitaron la zona de felinos, el reptilario y aviario; también participaron del show de aves rapaces y del show canino. Finalizado el recorrido, los niños participantes recibieron juguetes y kits didácticos de regalo.
Cabe mencionar, que se tuvo el apoyo de Scholastico, la empresa de transportes que donaron a todos los niños asistentes y sus papás, el poder ser transportados al Reino Animal, quienes fueron un punto fundamental para hacer este sueño realidad, asimismo muchas personas donaron superhéroes y muñecas para los niños para ser entregados a todos ellos.
Con ello se buscar favorecer la construcción de relaciones sólidas en el entorno familiar y escolar, contribuir al mejoramiento de las condiciones de vida de la población vulnerable y aportar al fortalecimiento de valores y habilidades socioemocionales.
