Fitness

LOS SEIS PRINCIPIOS BÁSICOS DEL MÉTODO PILATES DE PREPARACIÓN FÍSICA

1. Concentración Se debe prestar atención a los movimientos que se están haciendo. Piensa en cada paso que das y empezarás a darte cuenta de lo interrelacionados que están entre sí los movimientos del cuerpo. Haz que la mente intervenga en cada movimiento. Visualiza el siguiente paso, ¡esto hará que el sistema nervioso elija la combinación de músculos correcta para hacer el ejercicio! Cuando el cuerpo y la mente funcionen como un equipo alcanzarás un programa de ejercicio ideal.

2. Control. En el Método Pilates es muy importante que la mente controle completamente cualquier movimiento físico. En otras palabras, el movimiento y la actividad descontrolados producen un régimen de ejercicios fortuito y contraproducente. Algunos programas de ejercicios no dan importancia a este control y es por eso por lo que la gente se suele lesionar.

3. Centramiento. El cuerpo humano tiene un centro físico del que emanan todos los movimientos. Joseph H. Pilates llamó a esta zona la “Central eléctrica”: el abdomen, la parte inferior de la espalda y las nalgas. El Método Pilates presta atención al reforzamiento del este centro. Los músculos que están relacionados con la Central eléctrica sujetan la columna vertebral, los órganos internos y la postura que se adopta. Prácticamente, todos los ejercicios Pilates se centran en la Central Eléctrica con el fin de estabilizar el torso y poder estirar y alargar el cuerpo. El centramiento mejora la cintura, reduce el estómago y corrige la postura que se adopta con el fin de prevenir tanto el dolor de espalda como otras enfermedades.

4. Movimiento fluido. Romana Kryzanowska, la única discípula viva de Joseph H. Pilates, suele definir el Método Pilates como “un movimiento fluido que va desde un centro fuerte hacia el exterior”. El ejercicio hace que realices una gran cantidad de movimientos de una manera fluida y controlada. No hay que apresurarse en ningún paso, hay que hacerlos de una manera suave y uniforme, pues un movimiento rápido puede causar lesiones. Se tiene que pasar al ejercicio siguiente en cuanto se siente el esfuerzo, debiéndose evitar los movimientos rígidos o espasmódicos.

5. Precisión. La precisión va pareja al segundo principio, el “control”. Pilates decía: “Cada vez que hagas ejercicio, concéntrate en los movimientos correctos, si no los harás mal y no servirán para nada”. Hay que coordinar todos los movimientos y, en cuanto se conocen los pasos de cada ejercicio y uno se siente cómodo, se debe tomar el control del cuerpo e intentar hacer los movimientos correctos en cada ejercicio.

6. Respiración. Pilates hace hincapié en la importancia que tiene la pureza del flujo sanguíneo. Esta pureza se mantiene respirando correctamente mientras se hacen los ejercicios, al oxigenarse la sangre y eliminarse los gases nocivos. Joseph H. Pilates llegó a la conclusión de que la mejor técnica respiratoria para expulsar lo malo y absorber lo bueno es una exhalación plena forzada seguida de un hinchado completo de los pulmones mediante una inhalación profunda. Con el tiempo podrás coordinar la respiración con los movimientos de cada ejercicio. Por regla general, se inhalará para prepararse para un movimiento y se exhalará mientras se ejecuta.

Yesica Flores

Soy Yes, blogger desde hace más de 5 años. Me he especializado en el viejo y olvidado arte de divagar