Con protagónicos en cine, teatro y TV a nivel internacional, Zamia Fandiño busca su nueva aventura en Europa

Con 15 años de trayectoria artística y un currículum que demuestra que elige concienzudamente los proyectos en los que decide participar, la joven actriz Zamia Fandiño acaba de regresar de Europa, donde tuvo con productores e integrantes de la industria cinematográfica, con el objeto de cerrar negociaciones para sus nuevos proyectos, aunque por confidencialidad, aún no puede dar detalles del proyecto en el que acaba de involucrarse.
Fandiño, que posee dotes artísticas en diferentes expresiones como la actuación, la escritura, la fotografía y el diseño, entre otras cosas, supo muy pronto que su vocación consistía en estar sobre el escenario; sin embargo, decidió estudiar dos carreras a la vez: actuación en el Centro Nacional de las Artes y Comunicación en la Universidad Nacional Autónoma de México.
Decidida a sacar las dos profesiones, se percató que tenía que tomar una decisión para dedicarse de lleno solo a una. Zamia no lo dudó, quería ser actriz, pero no cualquiera. Ella considera que hay varios tipos de actores: los que son contratados para un proyecto y no se lo cuestionan, y los que quieren decir algo. “Yo pertenezco a estos últimos, porque yo quiero decir tantas cosas. Una de esas cosas es que tenemos que aprender a ser más conscientes, hay mucha inconsciencia, creo que vivimos un poco dormidos. Justo estoy escribiendo un guión sobre eso, sobre cómo pasamos la vida desapercibida, a veces necesitamos un cambio de perspectiva, una vuelta de tuerca para despertar”.
Alrededor de sus 20 años de edad se sumó a su primer proyecto, la obra de teatro “La Tempestad” con Mauricio Jiménez; “cuando leí la obra me enamoré del personaje Calibán, que es el monstruo de la isla, es un personaje entrañable. Muchas veces después de la función había personas del público que me esperaban afuera del teatro porque no sabían si el intérprete del personaje era hombre o mujer”.
La carrera, no sólo meteórica sino interesante de esta actriz, continuó de la mano del director Salomón Reyes con quien se fue a una gira por varias ciudades de Colombia con un montaje patrocinado por la ACNUR (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados), después le siguió su primer protagónico en cine con “Fandango”, de Marcel Sisniega, una cinta más bien del circuito de arte, que plantea una relación incestuosa y donde la actriz realizó su primer desnudo.
Viajó, inmediatamente después, a Panamá a interpretar su primer protagónico en telenovelas con “Lágrimas de diamante” para Canal 11 y TVN Panamá. Con el trato de estrella que recibió en este país, la actriz recuerda que perdió un poco el piso y fue su hermana quien la conminó a mantener los pies sobre la tierra.
La carrera de Fandiño cruza películas como “Suave Patria”, “Cantinflas, el rey de las carpas”, “El lado oscuro de la luz”, “Todos los días son tuyos”; y de las series televisivas donde ha participado se cuentan “Capadocia”, “XY”, “Bienes Raíces” , “Los Plateados”, “El Capitán”.
También cuenta con experiencias que la han enriquecido mucho como haber trabajado en El Cairo, Egipto en la película “Plenty”; en Philadelphia para el cortometraje “When we get together”, de Héctor Falcón; en New York para el cineasta Paul Di Palma; en Sao Paulo, Brasil trabajó con los productores de la película de “Cidade de Deus” y, en Barcelona con Albiñana Films. También hizo teatro en The Liverpool Institute for Performing Arts de Paul McCartney, en Inglaterra.
En el 2016 hizo un co-estelar con Mauricio Islas para la serie de “Perseguidos” de Imagen TV, y estrenó dos películas: “Un padre no tan padre” y “Manual de principiantes para ser presidentes”. A principios de este año obtuvo una estrella como mejor actriz por la obra “Prófugo”, escrita y dirigida por Juan Ríos Cantú.
Abierta a nuevas experiencias, deseosa de trabajar con conciencia de lo que hace y para qué lo hace esta joven actriz se prepara para nuevos retos, después de su viaje a Europa, donde se define su nuevo rumbo profesional.