UN CABALLERO Y SU REVÓLVER
– Última producción con Robert Reford, llega a las salas de cine este viernes 26 de abril a las salas comerciales bajo el sello de Cinépolis Distribución.
Es más que un adiós, es un hasta luego por parte del legendario Robert Redford, quien sin duda ha dejado una clara y fructífera huella dentro del séptimo arte, conquistando generaciones con su innegable carisma y talento actoral, inclusive orquestando una producción desde el banquillo de director, ¿había alguna cosa que no pudiera hacer este hombre? Porque inmortal ya es.
Un caballero y su revólver es más que el título de su última película, es el punto final de una carta escrita en prosa, con tonos altos y bajos que cautivan el sentir del espectador y logran generar una reconfortante calidez cinematográfica.
La historia sigue a Forrest Tucker (Robert Redford), un hombre que escapó de múltiples prisiones a lo largo de su vida, sus logros más recordados como ladrón fueron la fuga San Quintín a la edad de 70 años y una serie de atracos sin precedentes en gran parte de Estados Unidos, su estilo era sencillo: robar con elegancia y educación cada banco a su alcance. Todo esplendor tiene su gran final, de esto se encarga el detective John Hunt (Casey Affleck), quien descubre el modus operandi de Tucker mientras Jewel (Sissy Spacek), una encantadora mujer le recuerda que el amor no tiene límites ni edad.
Una cinta con la capacidad de transportar a quien la vea gracias a su completa atmósfera que rodea a Forrest Tucker durante los años 80 con una mística dosis de amor, empatía y una refinada personalidad, esto es conseguido por el ojo y la mano de David Lowery, quien se encargó de dirigir y firmar el guión de esta cinta, además su particular sello de autor también visto en A Ghost Story (2017) da muestra de su capacidad narrativa y creación de emociones a través de historias entrañables y personajes únicos e irrepetibles.
Por otro lado Robert Redford es sin duda el alma de esta cinta; basta con verlo unos segundos en pantalla para crear una poderosa conexión y dejarte seducir por la soltura actoral que tanto a caracterizado al intérprete californiano quien ahora presume 83 años de edad, inclusive utiliza el paso del tiempo y la experiencia en su rostro a su favor, remarcando la personalidad de Forrest Tucker mientras es envestido con desbordante presencia, clase y sabiduría de un hombre moderno.
Esta cinta no sigue el patrón narrativo de una persecución entre ladrón y agente al mero estilo de Catch Me If You Can (Steven Spielberg, 2002), por mencionar sólo un ejemplo; en la historia de Forrest Tucker se remarcan un par reflexiones: el motivo que impulsa al protagonista a cometer robos en múltiples bancos no es por el dinero, siempre se trató de vivir al máximo su vida, afrontar sus propios límites y no arrepentirse de cada una de sus decisiones, porque el tiempo es oro y las experiencias irrepetibles, Tucker fue un hombre sin ataduras, se encargó de ser un alma libre.
Y el otro gran impulso de la
cinta es su elocuente discurso intelectual entre Tucker y Hunt, el bueno contra
el (aparente) malo, sin embargo se percibe la preocupación por entregar una
poética historia por parte de David Lowery a través de una conmovedora relación
basada en el respeto y caballerosidad entre los personajes principales; siempre
existe la posibilidad de culminar una película utilizando en su máxima
expresión la lógica cotidiana, sin embargo este no es el caso, las reacciones y
gestos que definen al agente y al ladrón, acompañadas de actuaciones
sobresalientes, dan como resultado una historia inolvidable; si el destino
final en la carrera actoral de Robert Redford considera ésta su última cinta,
automáticamente una sonrisa en el rostro comenzará a desarrollarse en todo
aquel que la haya visto.Un caballero y su
revólver es
una película con una narrativa precisa que busca ofrecer el sentido humano de
cada personaje, el sello creativo y cinematográfico de David Lowery es el
puente entre nuestra apresurada realidad con la mágica atmósfera de amor y
alegría retratada en la historia. Además el trabajo actoral de Robert Redford
es capaz atrapa los sentidos de todo espectador atento, esperanzado de una
interpretación conmovedora que irremediablemente surge. La película renueva el
concepto de la distinción artística en la pantalla grande gracias a su
protagonista; porque sí, sólo se trata de vivir al máximo, sin ataduras ni
remordimientos.