Una de cada 10 personas presenta el Síndrome de Vejiga Hiperactiva
• En el XL Congreso Internacional del Colegio Mexicano de Urología se presentan nuevas opciones terapéuticas para este padecimiento.
• Un agonista del receptor adrenérgico ß3 actúa potenciando la relajación de la vejiga y mejora la fase de llenado de la misma, es la opción a los tratamientos actuales.
Puebla, abril 2016.- La vejiga hiperactiva se caracteriza por la presencia de urgencia urinaria, con o sin escapes de orina, y suele estar acompañada de un aumento de la frecuencia miccional durante el día y la noche.
De acuerdo con estadísticas mundiales, el Síndrome de Vejiga Hiperactiva (VH) afecta tanto a mujeres como hombres, cuya prevalencia aumenta con la edad; en ellas, los síntomas empeoran a partir de los 44 años y en el caso de ellos, por encima de los 60 años.
Cabe señalar que la vejiga hiperactiva repercute negativamente en la calidad de vida de los afectados, tanto por los síntomas que la caracterizan (urgencia y posible incontinencia), como por las estrategias que los pacientes adoptan para poder vivir con dichos síntomas.
Estas estrategias van desde el uso de absorbentes (toallas sanitarias, compresas o pañales) para las pérdidas de orina, a la disminución de la ingesta de líquidos, pasando por la localización de todos los sanitarios existentes en los lugares frecuentados y las visitas cada dos o tres veces al servicio sanitario para evitar que las ganas de orinar los sorprendan en cualquier momento, comentó el Doctor Dr. Sergio Durán Jefe de Servicio de Neurourología del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR).
Durante la realización del XL Congreso Internacional del Colegio Mexicano de Urología, aseguró que el aislamiento y el sentimiento de vergüenza son signos habituales presentes en el VH, pues llevan al paciente a reducir su actividad social y repercuten negativamente en su autoestima. Es frecuente asimismo la presencia de alteraciones en el sueño, debido a la necesidad de despertarse por las noches para vaciar la vejiga, así como la aparición de problemas de salud mental, como cuadros obsesivos y depresivos.
Para hacer un diagnóstico adecuado, el médico debe realizar una valoración de los síntomas (diario miccional, exploración física dirigida y análisis de orina) y de la función miccional. Esta evaluación permite, en muchos casos, realizar el diagnóstico e indicar un tratamiento inicial.
Existen distintos tratamientos que combinan medicamentos, ejercicios y cambio de hábitos para mejorar la calidad de vida de quienes lo padecen y estos dependerán del tipo y gravedad del problema que presente la vejiga. Actualmente, el tratamiento farmacológico es el pilar fundamental en el manejo de la Vejiga Hiperactiva.
Los agentes anticolinérgicos de tipo antimuscarínico son las drogas que han probado ser seguras y efectivas para el tratamiento. Sin embargo, una proporción de pacientes tienen síntomas severos que no responden al tratamiento o son incapaces de tolerar tales medicamentos debido a sus efectos secundarios, alcanzando tasas de abandono de hasta 50 por ciento.
Por este motivo es que se han seguido investigado nuevos fármacos que otorguen una eficacia adecuada de los síntomas y que a su vez reduzcan los efectos secundarios ocasionados por los antimuscarínicos (visión borrosa, sequedad de ojos y de boca, y estreñimiento).
La vejiga cumple dos funciones: el almacenamiento y vaciado de la orina; cuando este síndrome se presenta, afecta la fase de llenado, es decir, de almacenamiento. Lo que hacen los anticolinérgicos es ayudar a relajar la vejiga para disminuir las contracciones involuntarias que suelen presentarse, explicó el Dr. Daniel García Sánchez, Coordinador del Capítulo de Neurourología y Urología Femenina de la Sociedad Mexicana de Urología, y agregó que en cuanto al tratamiento, actualmente se están enfocando en las causas neurogénicas del problema.
Uno de los hallazgos más relevantes desde el punto de vista terapéutico surgió del estudio de los receptores adrenérgicos ß3 presentes en el músculo detrusor de la vejiga, cuya estimulación aumentaba la capacidad vesical al reducir las contracciones involuntarias de este órgano.
Así, se ha logrado desarrollar una entidad molecular nueva que actúa como un agonista del receptor adrenérgico ß3, el Mirabegrón, que es un fármaco único en su clase porque actúa potenciando la relajación de la vejiga y mejorando la fase de llenado de la misma.
En estudios experimentales se demostró que este tratamiento activa los receptores adrenérgicos beta-3 que provocan la relajación de los músculos de la vejiga y, gracias a esta acción, se consigue aumentar su capacidad y modificar el modo en que se contrae, lo que a su vez se traduce en un menor número de contracciones y, por tanto, en una disminución de las micciones involuntarias, a su vez que hay una reducción importante de los efectos secundarios provocados por el tratamiento antimuscarínico.
Estos avances fueron presentados durante el XL Congreso Internacional del Colegio Mexicano de Urología Nacional realizado en la ciudad de Puebla, que este año recibió a 600 médicos y tiene como propósito propiciar la Educación Médica Continua, como una oportunidad de capacitación así como la presentación de nuevas tecnologías en Urología.
“La Urología en México es cada vez una Urología más educada, más especializada y con más recursos tecnológicos para que los pacientes sean diagnosticados y tratados oportunamente y de la manera más apropiada”, concluyó el Dr. Eduardo Alonso Serrano presidente del Colegio Mexicano de Urología Nacional.