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Desafíos divertidos para estimular el aprendizaje en los niños

Los desafíos de una actividad educativa invitan a los niños a estar atentos y esforzarse al máximo para lograr los objetivos propuestos. Si buscamos enseñar algo nuevo o repasar un tema importante, es útil crear una actividad que desafíe sus habilidades y conocimientos.

Podemos contar adivinanzas o pedirles que elaboren un cuento sobre determinado tema o que adivinen objetos por su textura o aroma. Incluso, posibilitar que los niños jueguen en línea con un límite de tiempo o que resuelvan operaciones matemáticas en el marco de un problema.

En esta nota, detallamos algunos desafíos didácticos para hacer con los niños y estimular su aprendizaje.

Armar figuras geométricas

El desafío de armar figuras geométricas nos permite trabajar múltiples conocimientos de manera simultánea. La idea es ofrecer materiales para incentivar la capacidad resolutiva y creativa.

Podemos disponer de cartón, marcadores, regla y tijeras para que los niños construyan figuras tridimensionales. De este modo podemos enseñar, por ejemplo, cómo calcular el área de un rectángulo, su volumen y perímetro.

Crear juegos de preguntas

Este desafío es ideal para hacer en grupo, ya que pueden consultar entre pares y colaborar en las respuestas. Para armar nuestra lista de preguntas por asignatura podemos recurrir a plataformas educativas como tutorela.es. Allí, encontraremos ejemplos y ejercitaciones que nos darán muchas ideas. 

Contar adivinanzas

Debemos buscar adivinanzas de acuerdo a los temas de aprendizaje que pretendemos reforzar. La idea es empezar con algunas adivinanzas sencillas e ir aumentando el nivel de dificultad.

Otra opción es pedir a los niños que inventen sus propias adivinanzas. Con ellas, podrán desafíar a sus compañeros.

Cocinar

Incluso para cocinar recetas sencillas, necesitamos estar muy atentos y seguir los pasos al pie de la letra. Se puede practicar en la escuela, si la receta no requiere fuego, o pedir que los niños se reúnan en una casa y traigan a la clase el resultado final. Este desafío es de los más divertidos y gratificantes.

Continuar una historia

Escribir una historia desde cero suele ser un poco abrumador si no estamos acostumbrados. Por eso, es recomendable proponer un desafío literario con coordenadas claras, en el que los niños deban continuar la historia.

Puede ser una propuesta para resolver de forma individual o en grupos pequeños. La idea es que practiquen cómo armar una secuencia narrativa y compartan sus creaciones.

Descubrir a través de olores

Esta actividad permite incorporar conceptos a través de sensaciones que nos son familiares. Es un desafío que entusiasma a los niños y que siempre quieren repetir. Podemos llevar juguetes de distintos materiales o frascos con distintos alimentos y pedir que adivinen de qué se trata.  

Construir un instrumento musical

En este desafío debemos ofrecer a los niños materiales como recipientes vacíos, semillas, porotos, palos y láminas de plástico. Hecho esto, los invitamos a crear un instrumento.

Podemos dar instrucciones precisas o dejar que inventen a partir de lo que puedan imaginarse. Si se trata de niños muy pequeños, las maracas con vasos plásticos y semillas son una excelente opción.

Yesica Flores

Soy Yes, blogger desde hace más de 5 años. Me he especializado en el viejo y olvidado arte de divagar