Sobre Paseo de la Reforma se sitúa “el ángel” o “la victoria alada”, como se le conoce coloquialmente- a uno de los monumentos más distintivos de la Ciudad de México: el Ángel de la Independencia.
No hay construcción que represente mejor la libertad y el triunfo de los mexicanos que El Ángel de la Independencia; un lugar de reunión en donde las personas conviven, celebran, evocan respeto, inspiración o expresan:¡Viva México!…Y si hablamos de un testimonio artístico que nos ha regalado admiración e inspiración, indudablemente es la tradición orfebre, la cual encontró una forma de comunicación en las manos de los maestros joyeros de Oro de Monte Albán, los cuales apoyados con sensibilidad y herramientas manuales moldean con habilidad el metal y dan vida a magnificas joyas que narran la fortaleza del alma de México.
“Arras ángel” es una colección de joyería atemporal inspirada en la columna que se construyó para conmemorar el centenario de la independencia de México. La colección incluye: anillo, dije y aretes; y las monedas son las protagonistas; elaboradas en plata -recordando las “arras” que se utilizan en las bodas y lucen la imagen del emblemático “ángel de la independencia”, que se entrelaza con la delicada elegancia de la filigrana y las perlas; dando como efecto un aire elegante y contemporáneo.
La firma Oro de Monte Albán es un referente internacional de la joyería prehispánica. Su taller cuenta con la autorización del Instituto Nacional de Antropología e Historia de México (INAH) para realizar las reproducciones de las joyas en oro y plata más icónicas encontradas en la Tumba número 7 en Monte Albán, Oaxaca. Actualmente tiene puntos de venta en Oaxaca, en la zona arqueológica de Monte Albán, y el Centro Histórico de la Ciudad de México (The Shops DownTown).