Ventajas y desventajas de trabajar en función del ROI

Una empresa se puede considerar como productiva y rentable cuando los ingresos obtenidos son mayores a la inversión realizada. Para llegar a esta conclusión, es importante tener en cuenta una serie de indicadores que nos ayudarán a conocer tales datos, como es el caso del retorno de la inversión del negocio, mejor conocido como ROI, una métrica utilizada para determinar la probabilidad que tiene una compañía de recuperar su inversión inicial. 

Saber calcular el ROI puede traerle muchos beneficios a tu empresa, pues en base a su cálculo podrás implementar otras estrategias comerciales que potencien tu plan de negocios, ya sea para corregir fallas o reforzar métodos, aplicar nuevas tácticas de conversión de clientes o para realizar cualquier otra acción que aporte valor a la empresa. En este artículo nos enfocaremos en el ROI, su importancia y las ventajas y desventajas que se pueden obtener al aplicarlo en el sector empresarial.

¿Qué se entiende por ROI?

En inglés llamado Return on Investments (ROI) o Retorno Sobre la Inversión, corresponde al rendimiento que tiene una inversión en concreto. Se trata de una métrica que nos indica cuánto dinero ganó o perdió una empresa en base a las inversiones previamente realizadas.

Con el cálculo del ROI puedes saber si tu empresa en general está arrojando buenos resultados o no, e incluso te permite analizar proyectos por separado para determinar la efectividad de cada uno y con ello poder escoger el que más beneficios le genere a la empresa.

Para calcular el Retorno Sobre la Inversión de tu negocio, necesitas conocer tanto los ingresos totales de la empresa como la cantidad de dinero invertida. Una vez que tengas estos datos, debes aplicar la siguiente fórmula:

ROI = [(Ingresos – Inversión) / Inversión] x 100

El resultado que obtengas te indicará qué tan rentable está siendo tu empresa. Cuanto mayor sea el ROI, mayor será el rendimiento de su activo.

¿Cuál es la importancia de medir el ROI en una empresa?

El ROI es una métrica muy poderosa, pues además de determinar si merece la pena realizar una inversión en alguna área de la empresa, te permitirá evaluar a profundidad el rendimiento de tu compañía y saber qué modificaciones necesitas realizar para mejorar los resultados, ya sea que tengas que incorporar otros servicios, trabajar en las entregas a domicilio, ofrecer más facilidades y opciones de pago que vayan más allá de cobrar con tarjeta de débito y crédito, aceptar transferencias bancarias o recibir pagos en efectivo. Si utilizas correctamente esta herramienta, puedes medir la eficiencia y el éxito de todas las inversiones que realices en tu empresa.

Ventajas de utilizar el ROI

El cálculo del retorno de la inversión de una empresa puede ofrecer múltiples beneficios para los inversores potenciales o actuales, a continuación, te mostraremos algunos de ellos:

Brinda seguimientos sencillos y eficientes

La fórmula que se utiliza para determinar el valor del ROI es bastante simple, ya que requiere de pocas entradas y a cambio proporciona un valor de salida único, característica que la convierte en una táctica sencilla para darle seguimiento a la eficiencia y rentabilidad de una empresa.

Arroja resultados claros

Determinar si una empresa está funcionando correctamente o si requiere de estrategias para mejorar su rendimiento resulta una tarea simple y directa cuando se aplica el cálculo del ROI, ya que arroja resultados claros con números positivos cuando se trata de un buen rendimiento o números negativos, indicando que existe una pérdida de dinero.

Puede medir otras aplicaciones

El ROI puede ser utilizado no solo para medir el retorno que se obtiene al invertir, sino que también puede servir como una herramienta para el análisis de toma de decisiones, dar seguimiento a la eficiencia de la empresa, medir su rentabilidad, entre otros parámetros.

Permite evaluar diferentes áreas de una compañía

El cálculo del ROI puede ser aplicado en una variedad de inversiones y no solo para medir la rentabilidad general de la empresa. Si deseas saber el rendimiento de tus campañas de marketing, por ejemplo, puedes hacerlo aplicando la fórmula de ROI únicamente en esa área.

Desventajas de usar el ROI

Al igual que sucede con cualquier métrica comercial, utilizar el ROI puede arrojar algunas desventajas, entre ellas:

Resultados incorrectos

No saber ingresar los datos correctos en la fórmula del ROI puede alterar el resultado, arrojando valores de retorno inexactos. Uno de los errores más comunes que cometen los empresarios al calcular el ROI es confundir el flujo de caja con las ganancias, lo cual indica un rendimiento incorrecto. Para calcular un ROI útil es necesario determinar previamente su línea de base, para sacar cualquier beneficio adicional.

Sesgo potencial

Si bien, el valor del ROI es considerado como un indicador de ganancias o pérdidas, no siempre se toman en cuenta los matices. En el caso de las inversiones que tienen un ROI bajo, pero que siguen siendo positivas, pueden terminar siendo ignoradas por la empresa, si solo se enfocan en aumentar su ROI.

Variables involucradas

Sabemos que para calcular el ROI solo se necesita conocer el valor de la inversión y el de las ganancias obtenidas. Sin embargo, determinar con exactitud las variables involucradas en la relación costo/beneficio, puede modificar erróneamente el resultado, pues factores como los impuestos, intereses y el beneficio neto frente al bruto, pueden influir en el cálculo, dificultando la comparación precisa de la empresa.

Otros medidores de rentabilidad de una empresa

Si bien, la fórmula básica para medir el retorno de inversión es el que incluye a las ganancias totales y el dinero invertido, existen otros ratios que se pueden utilizar para medir otras aplicaciones, entre ellos el ROE, ROA, RRR y el VAN.

ROE

El ROE hace referencia al Return on Equity, lo que traducido al español viene siendo la rentabilidad financiera. Es una métrica que relaciona los beneficios netos de una empresa con los recursos que se necesitan para conseguirla. Su cálculo incide en la capacidad que tiene una empresa para generar ciertos beneficios para sus accionistas.

Para calcular el ROE de tu empresa, deberás dividir los beneficios netos entre los fondos propios, es decir el capital más reservas, tal y como se muestra a continuación.

ROE = (Beneficios netos / Fondos propios) x 100

Si el resultado obtenido es superior a la rentabilidad mínima que exige el accionista, significa que tu empresa se encuentra bien posicionada a nivel de rentabilidad.

ROA

La rentabilidad económica o Return on Assets (ROA), es un ratio utilizado para medir el rendimiento que obtiene una empresa por las inversiones que realiza. Básicamente, es un indicador que sirve para determinar la rentabilidad sobre los activos de una compañía.

Calcular el ROA es bastante sencillo, solo se deben dividir los ingresos obtenidos en un determinado periodo de tiempo, entre los activos totales.

ROA = (Beneficios netos / Activo total) x 100

Para saber si tu empresa es rentable, el resultado que obtengas de tu ROA debe superar el 5 %.

RRR

La tasa de retorno real por su parte, se encarga de medir el rendimiento de una inversión luego de haber ajustado la inflación, los impuestos y demás factores externos.

VAN

Hace referencia al valor actual neto y permite calcular el valor actual de una inversión basándose en proyecciones que han sido ajustadas a la inflación de sus posibles ganancias futuras.