El champagne Louis Roederer ideal para disfrutar en cualquier ocasión
Los consejos básicos para deleitarse con las burbujas por excelencia
Ciudad de México, a 16 de Junio de 2016.- Desde siempre, el champagne se ha vinculado a celebraciones o fechas especiales como la Navidad y el Año Nuevo, sin embargo existen infinidad de ocasiones en el que solo o acompañado, es la bebida por excelencia.
Antes de degustarlo y asegurar su sabor y frescura, hay que tomar en cuenta algunos detalles. Para comenzar, la botella se debe enfriar de preferencia en un cubo con hielo y un tercio de agua, por un lapso de 15 a 20 minutos. La temperatura para servirlo es de 10º C.
Cuando la botella no se termina, un error común guardarlo dentro del refrigerador. Después de algunos días almacenada ahí, el corcho puede llegar a secarse y dejar que el aire entre en la botella pudiendo cambiando sabores, aromas y sobre todo efervescencia. corcho puede llegar a secarse y dejar que el aire entre en la botella, cambiando sabores, aromas y sobre todo efervescencia. Lo más recomendable es disfrutar hasta el final.
La mejor manera de beber el champagne es en una copa flauta, llenándola solo en una tercera parte. Si se agrega más, el liquido se calentará demasiado rápido y podría perder su frescura y efervescencia. La copa, la cual debe sostenerse por el tallo será el testigo principal de una explosión de aromas y sabores complejos, además de un espectáculo efervescente que brindan las burbujas únicas de champagne Louis Roederer.
Para la elaboración del champagne, la casa Louis Roederer trabaja en su bodega de Reims en Francia a doce metros bajo tierra, con un espacio de almacenamiento y creación de este elixir de 7 kilómetros, siempre bajo ojos expertos.
El champagne es una bebida tan noble que se puede disfrutar como aperitivo, un brindis o como el acompañante perfecto de aves, pescados, verduras, risottos y postres. Para ello la marca Louis Roederer cuenta con una gama de exclusivas etiquetas como Brut Premier, Brut Vintage Rosé, Carte Blanche, Blanc de Blancs, y Cristal la joya de la casa.
Este delicado elixir, también permite hacer maridajes excepcionales con la gastronomía mexicana, ya que el paladar aprecia su toque refrescante y efervescencia, que al juntarse con platillos cremosos y especiados, crean una sensación exquisita.
Gracias a la riqueza de sus propios viñedos de 214 hectáreas en las principales zonas de Champagne en Francia, Louis Roederer crea sus propios vinos de base, además de largos procesos de producción artesanales y un tiempo de reposo en botella sobre lías, que son los sedimentos que nacen de la fermentación de las levaduras en la botella. Todo esto lleva un proceso de más de tres años a temperaturas ideales, que dan como resultado un “Champagne de Propiedad”, digno de cualquier ocasión y exigente paladar.
Champagne Louis Roederer, es representada y distribuida en México por Importaciones Interamericana www.interamericana.mx
Acerca del Grupo Louis Roederer
La pasión por los grandes vinos han llevado, a lo largo de los años, Jean Claude y luego Fréderic Rouzaud a reunir alrededor de la Casa de Champagne de Reims una pequeña constelación de “domaines” o propiedades, que aunque administradas con una real independencia, comparten la misma filosofía de excelencia, y constituyen hoy en día el Grupo Louis Roederer: se trata de Roederer Estate y Scharffenberger en Californie, du Champagne Deutz y de la Maison Delas en el valle de Ródano, de Ramos Pinto y de sus viñedos del Douro en Portugal, de los Domaines Ott en Provence, de los Châteaux de Pez et Haut Beauséjour en Bordeaux ( Saint Estéphe) que fueron alcanzados a fin de año 2006 por Pichon Longueville Comtesse de Lalande ( Pauillac). El grupo vendió 3.8 millones de botellas de champagne por un valor 220 millones de euros en 2011.