Las mexicanas están dispuestas a tomar mayores riesgos que los hombres a la hora de emprender

• Para las mexicanas, el compromiso con su proyecto personal es un pilar fundamental a la hora de crear su propia empresa.
• Según el AGER, el levantamiento de capital es el área donde las mujeres emprendedoras requieren de mayor apoyo.
• Dentro del marco de la celebración del Día de la Mujer, se hace un llamado para continuar impulsando a las emprendedoras mexicanas.

Ciudad de México, 8 de marzo de 2019 – ¿Cuáles son las principales barreras a las que se enfrentan las mujeres emprendedoras? ¿Cuáles son los factores en los cuales las emprendedoras requieren mayor apoyo? ¿Qué características tienen las personas que deciden emprender? Estos fueron algunos de los datos que arrojó la octava edición del Reporte Global de Emprendedores Amway, AGER por sus siglas en inglés, que mide el estado del emprendedurismo en 44 países alrededor del mundo.

Esta investigación que tiene como objetivo identificar los aspectos que propician o entorpecen el espíritu emprendedor en México y el mundo, fue aplicada a un grupo de 1,013 mujeres y hombres de más de 14 años residentes de la Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey y entre algunas de sus conclusiones se exhibe el aumento creciente del interés de las mujeres por el emprendimiento.

ENTORNO EMPRENDEDOR PARA LAS MUJERES

FACTORES EXTERNOS
El estudio considera los elementos del entorno y cómo estos impulsan o entorpecen la intención de emprender.
• Las mayores barreras para las emprendedoras mexicanas son el sistema tributario y la situación económica en México, en donde sólo el 11% piensa que es beneficiosa.
• Si bien la percepción de las mexicanas hacia el sistema educativo es poco favorable, el boom tecnológico ha habilitado diferentes modelos para las emprendedoras del país.
• México sigue siendo una zona atractiva para diversos inversionistas extranjeros gracias al espíritu emprendedor de su población.
“México tiene un potencial enorme en temas de emprendimiento. Tras haber estudiado en Canadá e Italia, y desarrollar negocios en diversos países de Europa y América, me di cuenta del valor de la calidez y las relaciones de confianza que se generan entre los mexicanos siendo nuestro país terreno fértil para empresas como Amway”, mencionó Fernanda Martínez Parente, empresaria de Amway.

FACTORES INTERNOS
El estudio examinó las habilidades y aptitudes de las encuestadas respecto a iniciar y administrar un negocio.
• Las mexicanas se destacaron por estar más dispuestas que los hombres a la hora de emprender (42%) e invertir parte de su tiempo libre para desarrollar su idea de negocio. Por lo mismo, el compromiso es un pilar fundamental para ellas a la hora de crear su propia empresa (46%).
• Por otro lado, los factores representan mayor dificultad para las mujeres emprendedoras son la baja confianza en su capacidad para generar una idea de negocio y la habilidad para recaudar el capital necesario para lograrlo.

NEGOCIOS IDEALES PARA LAS EMPRENDEDORAS EN POTENCIA
Con relación al modelo y características de negocio que prefieren las emprendedoras el reporté encontró lo siguiente:
• La mayoría de las mexicanas se inclina por tener una empresa socialmente orientada que esté ubicada en una zona metropolitana.
• En México, las emprendedoras prefieren dedicarse a la venta de productos (63%) por medio de contacto personal con sus clientes (81%) y con el apoyo de un equipo laboral.

MÉXICO EN TÉRMINOS DE EMPRENDIMIENTO FEMENINO
En términos globales, uno de los mayores retos a los que se enfrentan las mujeres empresarias, es al momento de levantar capital para iniciar su propio negocio, además del temor a ser rechazadas por las instituciones bancarias.

Banco Mundial calcula que el 70% de las mujeres que emprenden no tienen acceso a ningún tipo de financiamiento, lo que ocasiona un déficit de alrededor de 300,000 millones de dólares en materia de emprendimiento.

Sin embargo, la organización en materia contable y de pagos, ha permitido a las mujeres ir ganando confianza ante las entidades financieras. Esto, sumado a la sensibilidad de las emprendedoras por entender y responder con claridad a las necesidades del mercado, ha ido abriendo cada vez más puertas a una nueva ola de mujeres que ven en el emprendimiento su vía hacia el desarrollo profesional y personal.