Evita la cuesta de enero
Cada nuevo año trae consigo retos y oportunidades personales y profesionales, pero enero suele ser un mes difícil, al menos financieramente hablando.
Enero es particularmente complejo por todos los gastos que hubo en diciembre. Los regalos, las comidas, las cenas navideñas con amigos y familiares hacen que nuestros gastos aumenten de manera considerable, aunque esto se ve compensado por el aguinaldo.
Desafortunadamente, ni el aguinaldo ni el sueldo de diciembre son suficientes para cerrar el mes de manera estable. El 84% de los mexicanos considera tener dificultades financieras el primer mes del año debido a todo lo que conllevan las fiestas decembrinas. Por otra parte solo el 11.5% acostumbra a prepararse para la cuesta de enero.[1]
Una estrategia para enfrentar la cuesta de enero es apartar una parte del aguinaldo para hacer frente a nuestras obligaciones financieras en enero, como los pagos de las tarjetas de crédito por ejemplo.
Hacer un presupuesto siempre ayuda para tener claridad en nuestros estados financieros. Poner de un lado de la balanza nuestros ingresos y del otro lado nuestros gastos fijos (como la renta) y gastos variables (como los pagos de nuestras tarjetas) nos dirán cómo están nuestras finanzas personales.
Si el aguinaldo no se utilizó para pagar las deudas que teníamos pendientes, es importante no dejar de pagar nuestras obligaciones y con ello evitar el pago de intereses. Los cargos que llegan a hacer las tarjetas de crédito o servicios de reconexión, en caso de que nos corten un servicio, suele desbalancear nuestras finanzas.
Si la cuesta de enero luce muy difícil y tenemos muchas obligaciones financieras, una alternativa para capitalizarnos es pedir un préstamo o empeñar alguna prenda. Lo anterior, siempre y cuando sea necesario y debe ser considerado como la última opción.[2]
Si el dinero que vamos a recibir por el préstamo o empeño lo utilizamos para gasto corriente (como nuestras salidas) y no para pagar nuestras obligaciones podemos estar en la antesala de problemas financieros.
Hoy existe un abanico muy amplio para pedir un préstamo o empeñar una prenda. Lo ideal es encontrar bajas tasas de interés con pagos que se acoplen a nuestras necesidades.
El 2020 no tiene por qué iniciar de mala manera. Una correcta administración de nuestro dinero, evitar gastos excesivos y un presupuesto personal real nos evitará la cuesta de enero y muchos dolores de cabeza.
Por: Principal
[1] https://www.condusef.gob.mx/Revista/index.php/usuario-inteligente/consejos/884-que-la-cuesta-de-enero-no-te-cueste
[2] https://www.condusef.gob.mx/Revista/index.php/presupuesto-familiar/presupuesto/749-cuidado-con-la-cuesta-de-enero
